Si estás pensando en reformar tu casa, planificar una cocina abierta al salón puede ser una de las mejores decisiones. Esta tendencia ha ganado popularidad por sus ventajas estéticas y funcionales, pero requiere un buen diseño para que todo encaje a la perfección.
El principal beneficio de planificar una cocina abierta es la sensación de amplitud y luminosidad. Al eliminar tabiques, la luz natural fluye entre los espacios y se crea una zona social más grande y conectada. Esto facilita compartir tiempo en familia y con amigos mientras cocinas.
Otro punto positivo es la versatilidad. Al planificar este tipo de cocinas, puedes integrar una isla o península que sirva de zona de trabajo, barra de desayuno o espacio de almacenaje. Estos elementos ayudan a delimitar ambientes sin perder unidad visual.
Sin embargo, es importante tener en cuenta algunos aspectos. La ventilación y la extracción de humos son fundamentales para evitar que los olores lleguen al salón. Instalar una campana de alta potencia y sistemas de ventilación eficientes es clave para un resultado óptimo.
La organización también cobra protagonismo. Al planificar una cocina abierta, conviene apostar por muebles con gran capacidad de almacenaje y electrodomésticos integrados, de modo que el espacio se vea siempre ordenado.
Por último, presta atención a la decoración. La paleta de colores y los materiales deben mantener una coherencia con el salón. De esta forma, conseguirás que la cocina y la zona de estar se perciban como un todo armónico.
Si sueñas con un hogar diáfano, moderno y funcional, planificar una cocina abierta es una opción que transformará tu día a día. En Cocinova te ayudamos a crear un proyecto adaptado a tus gustos y necesidades.