Conseguir la Iluminación perfecta en el baño mejora la seguridad, el confort y hasta la sensación de amplitud. En este espacio necesitamos ver con nitidez para las rutinas diarias y, al mismo tiempo, crear un ambiente relajante. Con una buena planificación puedes lograr la Iluminación perfecta en el baño sin obras complejas.
Luz por capas
Diferencia tres capas: general, de trabajo y ambiental. La luz general puede resolverse con plafones o downlights de 3.000–4.000K y difusión uniforme. La de trabajo se concentra en el espejo: apuesta por apliques laterales o espejos retroiluminados para evitar sombras en el rostro. La ambiental llega con tiras LED ocultas bajo el mueble o detrás del espejo, ideal para relajarse por la noche.
Seguridad en zonas húmedas
Elige luminarias con grado de protección IP adecuado según su cercanía al agua. En duchas y bañeras, IP65 o superior; en el resto, IP44 es una buena base. Además, busca un alto CRI para que los colores de piel y maquillaje sean fieles a la realidad.
Planificación y control
Antes de elegir focos, decide dónde irán espejo, ducha y almacenaje. Así ubicarás interruptores y enchufes con lógica. Los reguladores de intensidad y sensores ayudan a adaptar la iluminación a cada momento. También puedes integrar domótica básica para escenas: despertar, relax, noche.
Diseño que suma
Para redondear la Iluminación perfecta en el baño, coordina las luminarias con griferías y herrajes. Perfiles negros o metálicos funcionan muy bien con estilos actuales. Evita deslumbramientos con difusores opal y orienta los focos fuera del campo de visión. Los espejos antivaho con luz perimetral amplían visualmente el espacio.
Mantenimiento
No lo olvides: limpia difusores y espejos con regularidad y elige LED de calidad con garantía y larga vida útil. Así conservarás esa Iluminación perfecta en el baño como el primer día.